Si quieres llevar una alimentación saludable y prevenir la obesidad, existen diferentes hábitos alimenticios que puedes ir cambiando poco a poco en tu día a día, que te ayudaran a largo plazo, sin tener que hacer un cambio exagerado.
¿Qué recomendaciones debemos llevar?
- Aumentar el consumo de cereales integrales (pan integral, pasta integral, arroz integral…). Seguramente nunca te has planteado tomar el arroz o la pasta integral. Pues debes saber que los cereales integrales tienen un mayor contenido en fibra, provocando que los azúcares se liberen más lentamente en la sangre (tienen un índice glucémico más bajo), dificultando que estos hidratos se almacenen en forma de grasa. Además, la fibra es un gran regulador gastrointestinal, evitando el estreñimiento. Destacar que el contenido calórico de los cereales integrales y los cereales refinados es casi el mismo, pero el mayor contenido en fibra es lo que lo hace beneficioso).
- Tomar más cantidad de frutas frescas y verduras a diario. Es recomendado tomar al menos 5 raciones de frutas y verduras cada día. Estos alimentos suelen ser bajos en calorías y nos aportan una gran cantidad de vitaminas, minerales, antioxidantes y fibra. Son altamente saludables y beneficiosos.
- Incluir más a menudo legumbres en nuestra alimentación, al menos 2 veces a la semana. Las legumbres nos aportan principalmente proteínas vegetales, hidratos de carbono de absorción lenta (índice glucémico bajo) y fibra.
- Comer más frutos secos. Son altamente calóricos, pero a la vez son muy beneficiosos, ya que son ricos en grasas saludables, ya que la mayoría de ellos contienen ácidos grasos omega-3, que previenen las enfermedades cardiovasculares. Así que, si la duda es si puedes tomarlos haciendo dieta, la respuesta es sí, ya que un puñado de frutos secos a diario no aportarán notables calorías, pero si enriquecerá nutricionalmente la dieta.
- Moderar el consumo de azúcares, bebidas azucaradas y bollería. Contienen un alto contenido en azúcares de absorción rápida, provocando que pasen a la sangre rápidamente (alto índice glucémico) y facilitando que se almacenen en forma de grasa.
- Moderar el consumo de carnes rojas y procesadas, ya que tienen un alto contenido en grasas saturadas. Además, las carnes procesadas presentan una gran cantidad de sal, siendo muy perjudicial para las personas hipertensas.
- Moderar el consumo de alimentos procesados, ya que suelen presentar un alto contenido en grasas saturadas y en sal. Antes de decidirte a comprar alguno, repasa la tabla de composición de alimentos, es posible que se te quiten las ganas de comprarlo.
¿Qué conclusiones sacamos?
Si poco a poco consigues seguir estas recomendaciones, lograras alcanzar un peso óptimo y presentar un estado de salud inmejorable. Si ves que solo no eres capaz, Dietfarma te podrá ayudar con el asesoramiento de un nutricionista online, que se centrará en hacerte una dieta mediterránea y saludable.