Se define como un aumento anormal en el número de deposiciones, acompañado de una disminución de la consistencia de estas, siendo más líquidas.
Fisiológicamente la diarrea es un mecanismo defensivo del propio intestino que detecta algún elemento peligroso y mediante un torrente de agua, intenta expulsarlo vía anal. Esta expulsión la hace lo antes posible para que el elemento peligroso detectado no sea absorbido.
La diarrea puede tener diferentes causas:
- Gastroenteritis vírica. Por la presencia de virus en el tubo digestivo.
- Intoxicación alimentaria. Por el consumo de alimentos y bebidas en mal estado.
- Intolerancia alimentaria. Son casos en los que no son capaces de hacer una digestión correcta de algunos alimentos. Intolerancia a la lactosa o al gluten.
- Ingesta de fármacos. Algunos medicamentos tienen, como efecto secundario, algunos síntomas gastrointestinales (ej. Antibióticos, tratamientos contra el cáncer, productos para evitar el estreñimiento).
- Patologías del tubo digestivo. Enfermedad de Crohn, el síndrome del intestino irritable, la colitis ulcerosa.
- Intervenciones digestivas. En estas intervenciones se deja inutilizada una parte del estómago con el objeto de reducir así la ingesta de alimentos y conseguir una pérdida de peso en pacientes con obesidad mórbida, pero los efectos no deseables es la diarrea.
Cuando la diarrea es debido a una intoxicación alimentaria, a no ser que sea estrictamente necesario, no conviene tomar ningún medicamento que corte de forma brusca la diarrea, porque ese elemento dañino que está produciendo la diarrea, permanecerá más tiempo en el interior del organismo.
La dieta es fundamental para disminuir los efectos de la diarrea, evitar la deshidratación y no agravar el proceso. Debemos incrementar la ingesta de líquido, en particular los que son ricos en sodio y potasio, como el caldo de pollo.
Es recomendable consumir los alimentos a temperatura ambiente o templado. Tomar raciones pequeñas muchas veces al día (6-10 tomas) y preferiblemente alimentos con poca fibra y proteicos.
La actividad de la enzima lactasa, que sirve para digerir la leche, puede3 no funcionar bien mientras persiste la diarrea, así que es recomendable evitar la leche hasta que finalice la diarrea.
ALIMENTOS QUE DEBEMOS TOMAR.
- Yogurt natural.
- Arroz, pasta y pan blanco
- Patata y zanahoria cocida y en forma de puré.
- Huevos cocidos.
- Pescado cocido, pechuga de pollo cocida sin piel y jamón cocido sin grasa.
- Papillas de harina de arroz hechas con agua o con leche sin lactosa.
- Frutas: manzana y plátano.
ALIMENTOS QUE NO DEBEMOS TOMAR.
- Leche o queso, especialmente los curados.
- Alimentos grasos o fritos.
- El resto de verduras y frutas.
- Las legumbres.
- La piel de los alimentos.
- El café, el té y el chocolate.
- Las bebidas con alcohol y con gas.