¿Qué son las enfermedades cardiovasculares?
Las enfermedades cardiovasculares (ECV) son la principal causa de mortalidad a nivel mundial. Estas patologías incluyen condiciones cómo la hipertensión, enfermedad coronaria, insuficiencia cardíaca y accidente cerebrovascular. Una alimentación adecuada es fundamental tanto para prevenir cómo para manejar estas afecciones. Este artículo explora la fisiopatología de las ECV, los alimentos recomendados y prohibidos, y las dietas más eficaces para proteger la salud cardiovascular
Fisiopatología de las Enfermedades Cardiovasculares
Las enfermedades cardiovasculares (ECV) comprenden un grupo de trastornos del corazón y los vasos sanguíneos, entre los que se incluyen la enfermedad coronaria, la hipertensión arterial, la insuficiencia cardíaca y el accidente cerebrovascular. La fisiopatología de estas afecciones se basa principalmente en la alteración de las funciones cardíacas y circulatorias debido a varios factores de riesgo, los cuales afectan la estructura y función del sistema cardiovascular.
Aterosclerosis
La principal patología subyacente en muchas ECV es la aterosclerosis, una enfermedad crónica caracterizada por la acumulación de placas de ateroma en las paredes de las arterias. Estas placas están formadas por lípidos (especialmente colesterol), células musculares lisas, tejido fibroso y calcio, lo que disminuye el diámetro de las arterias y restringe el flujo sanguíneo.
La aterosclerosis se desencadena por una combinación de factores como la hipertensión, dislipidemia (niveles elevados de colesterol, LDL y triglicéridos), e inflamación crónica en las arterias. Esta inflamación puede dañar el endotelio (la capa interna de las arterias), lo que favorece la formación de placas ateroscleróticas y la posterior obstrucción del flujo sanguíneo. Esto puede provocar angina de pecho, infarto de miocardio o accidente cerebrovascular.
Disfunción endotelial
El endotelio, una capa delgada de células que recubre los vasos sanguíneos, juega un papel crucial en la regulación del tono vascular y la coagulación. La disfunción endotelial, en la que el endotelio pierde su capacidad para producir sustancias vasodilatadoras (como el óxido nítrico), es un factor temprano en la aterosclerosis y contribuye a la hipertensión y la formación de trombos. Esta disfunción también facilita la adherencia de leucocitos y plaquetas a las paredes arteriales, lo que agrava el proceso aterosclerótico.
Hipertensión
La hipertensión es uno de los factores de riesgo más importantes para las ECV. La presión arterial elevada ejerce una carga adicional sobre el corazón y los vasos sanguíneos. A largo plazo, la hipertensión puede llevar al engrosamiento del miocardio (el músculo cardíaco) y al deterioro de los vasos sanguíneos, lo que contribuye a la insuficiencia cardíaca y aumenta el riesgo de eventos cardiovasculares como infartos y accidentes cerebrovasculares.
Además, la hipertensión es un factor importante en la disfunción endotelial y la inflamación crónica, lo que crea un círculo vicioso de daño vascular.
Estrés oxidativo e inflamación crónica
El estrés oxidativo es otro mecanismo fundamental que promueve las ECV. Se refiere a un desequilibrio entre la producción de radicales libres y la capacidad del cuerpo para neutralizarlos con antioxidantes. Los radicales libres pueden dañar las células endoteliales, las arterias y otras estructuras celulares, lo que contribuye a la formación de placas ateroscleróticas.
La inflamación crónica también juega un papel crucial. En la aterosclerosis, la acumulación de células inflamatorias en las paredes arteriales promueve el crecimiento de las placas y facilita su ruptura, lo que puede causar la formación de coágulos sanguíneos y bloquear el flujo sanguíneo hacia el corazón o el cerebro.
Etiología de las Enfermedades Cardiovasculares
La etiología de las enfermedades cardiovasculares está relacionada con una serie de factores de riesgo genéticos, y factores modificables y no modificables.
Factores Genéticos
La predisposición genética juega un papel importante en el riesgo de desarrollar ECV. Las personas con antecedentes familiares de enfermedades cardiovasculares tienen un mayor riesgo. Algunos genes están relacionados con niveles elevados de colesterol LDL, triglicéridos, y con la tendencia a desarrollar hipertensión.
Factores Modificables
– Dieta poco saludable: El consumo elevado de grasas saturadas, azúcares refinados y sal es un factor de riesgo importante para la hipertensión, la dislipidemia y la aterosclerosis.
– Sedentarismo: La falta de actividad física contribuye a la obesidad, la diabetes tipo 2, y la hipertensión, todos ellos factores de riesgo para las ECV.
– Fumar: El tabaco causa daño a las paredes de los vasos sanguíneos, aumenta la presión arterial y acelera la formación de placas ateroscleróticas.
– Consumo excesivo de alcohol: El consumo de alcohol puede aumentar la presión arterial y afectar el equilibrio de lípidos en la sangre, lo que favorece la aparición de ECV.
– Estrés crónico: El estrés sostenido activa mecanismos de inflamación e induce cambios en el comportamiento (como la alimentación poco saludable y la inactividad física) que incrementan el riesgo cardiovascular.
Factores no Modificables
– Edad: El riesgo de enfermedades cardiovasculares aumenta con la edad, especialmente después de los 50 años en hombres y 60 años en mujeres.
– Sexo: Los hombres tienen un mayor riesgo de desarrollar ECV a una edad más temprana en comparación con las mujeres. Sin embargo, después de la menopausia, el riesgo cardiovascular de las mujeres aumenta considerablemente.
– Antecedentes familiares: Un historial familiar de enfermedades cardiovasculares, especialmente en familiares de primer grado (padres, hermanos), aumenta el riesgo de sufrir estas patologías.
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Alimentos Recomendados para la Salud Cardiovascular
Frutas y Verduras
Las frutas y verduras son ricas en antioxidantes, fibra, vitaminas y minerales, esenciales para la salud del corazón. La fibra soluble, por ejemplo, ayuda a reducir los niveles de colesterol LDL (colesterol malo) y mejora la circulación sanguínea. Las verduras de hoja verde, como las espinacas y la acelga, y las frutas como los arándanos, fresas y manzanas son excelentes opciones.
Granos Integrales
El consumo de granos integrales en lugar de granos refinados (como el pan blanco o el arroz blanco) ayuda a mejorar los niveles de colesterol y a regular la presión arterial. Los granos enteros como la avena, la quinoa, el arroz integral y el pan integral son ricos en fibra y micronutrientes que ayudan a mejorar la salud cardiovascular.
Ácidos Grasos Omega-3
Los ácidos grasos omega-3, encontrados en pescados grasos como el salmón, las sardinas y las truchas, son fundamentales para reducir los niveles de triglicéridos, disminuir la inflamación y mejorar la función endotelial. También pueden prevenir la formación de coágulos sanguíneos que pueden desencadenar un infarto de miocardio.
Aceite de Oliva Virgen Extra
El aceite de oliva virgen extra es rico en grasas monoinsaturadas, que pueden reducir los niveles de colesterol total y colesterol LDL sin afectar el colesterol HDL (colesterol bueno). Además, contiene polifenoles que tienen propiedades antiinflamatorias.
Frutos Secos y Semillas
Almendras, nueces, avellanas, semillas de lino y chía son ricos en grasas saludables (mono y poliinsaturadas), fibra y antioxidantes. Estos alimentos no solo mejoran el perfil lipídico, sino que también tienen un efecto antiinflamatorio que beneficia la función cardiovascular.
Legumbres
Las lentejas, garbanzos, frijoles y otras legumbres son excelentes fuentes de proteínas vegetales, fibra y minerales como el potasio. Su consumo regular ayuda a reducir el colesterol y mejorar la presión arterial.
Té Verde
El té verde es rico en catequinas, un tipo de antioxidante que ayuda a reducir la inflamación y mejora la función endotelial. El consumo regular de té verde se ha asociado con una disminución del riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Alimentos No Recomendados para la Salud Cardiovascular
Grasas Saturadas y Trans
Las grasas saturadas y grasas trans elevan los niveles de colesterol LDL y disminuyen el colesterol HDL, lo que aumenta el riesgo de aterosclerosis. Estas grasas se encuentran en alimentos como la mantequilla, grasa animal, aceites parcialmente hidrogenados (utilizados en productos procesados) y comida rápida.
Carnes Procesadas
Las carnes procesadas como el tocino, las salchichas, los embutidos y el jamón contienen altos niveles de sodio, grasas saturadas y nitritos, que pueden elevar la presión arterial y aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Alimentos Altos en Azúcares Refinados
El consumo excesivo de azúcares refinados y carbohidratos simples, presentes en bebidas azucaradas, dulces, galletas y pasteles, puede causar aumento de peso, obesidad y dislipemia, elevando los riesgos de enfermedades cardiovasculares.
Sal en Exceso
El consumo excesivo de sal es un factor clave en la hipertensión arterial, uno de los principales factores de riesgo para las enfermedades cardiovasculares.
Alcohol en Exceso
El consumo excesivo de alcohol eleva la presión arterial, aumenta los triglicéridos y favorece el desarrollo de arritmias. Aunque el consumo moderado de alcohol (especialmente vino tinto) se ha asociado con algunos beneficios cardiovasculares, el exceso es perjudicial.
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Dietas Recomendadas para la Salud Cardiovascular
Adoptar un estilo de vida saludable, que incluya una dieta adecuada, es crucial para la prevención y manejo de las enfermedades cardiovasculares. Diferentes enfoques dietéticos se han demostrado efectivos para mejorar la salud del corazón, reducir los factores de riesgo y mejorar la calidad de vida en personas con enfermedades cardiovasculares. A continuación, se desarrollan algunas de las dietas más recomendadas.
Las dietas recomendadas para la salud cardiovascular son:
– Dieta Mediterránea
– Dieta DASH (Dietary Approaches to Stop Hypertension)
– Dieta Plant-Based (Basada en Plantas)
– Dieta Baja en Grasas Saturadas y Trans
– Dieta Mind (Mediterranean-DASH Diet Intervention for Neurodegenerative Delay)
Dieta Mediterránea
La dieta mediterránea es un patrón alimentario inspirado en los hábitos de las poblaciones que viven en la región mediterránea. Esta dieta es ampliamente reconocida por sus beneficios cardiovasculares, ya que promueve una ingesta alta en alimentos frescos, sin procesar, y con un alto contenido de grasas saludables.
1. Características Principales de la Dieta Mediterránea
– Grasas saludables: Predomina el consumo de aceite de oliva virgen extra, que es rico en ácidos grasos monoinsaturados.
– Pescados y mariscos: Consumo frecuente de pescados grasos (como el salmón, la caballa y las sardinas), ricos en ácidos grasos omega-3.
– Frutas y verduras: Consumo abundante de frutas, verduras y legumbres que proporcionan fibra, vitaminas, minerales y antioxidantes.
– Frutos secos y semillas: Se incluyen en la dieta alimentos ricos en grasas saludables, como almendras, nueces, pistachos y semillas de chía.
– Lácteos bajos en grasa: Se recomienda consumir lácteos fermentados como el yogur natural, que proporcionan calcio y probióticos beneficiosos para la salud cardiovascular.
2. Beneficios de la Dieta Mediterránea
– Reducción de los niveles de colesterol LDL (colesterol malo) y mejora de los niveles de colesterol HDL (colesterol bueno).
– Disminución del riesgo de enfermedades cardiovasculares y de muerte prematura debido a su capacidad para reducir la inflamación y mejorar la salud de los vasos sanguíneos.
Varios estudios han demostrado que seguir una dieta mediterránea puede reducir el riesgo de enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares, además de mejorar la salud metabólica y la presión arterial.
Dieta DASH (Dietary Approaches to Stop Hypertension)
La dieta DASH (Enfoques Dietéticos para Detener la Hipertensión) fue desarrollada inicialmente para ayudar a reducir la presión arterial alta, pero ha demostrado ser útil también para mejorar la salud cardiovascular general.
1. Características Principales de la Dieta DASH
– Baja en sodio: Limita el consumo de sal, lo cual es fundamental para el control de la hipertensión.
– Alto contenido en frutas y verduras: Fomenta el consumo de al menos 4-5 porciones de frutas y 4-5 porciones de verduras al día.
– Granos enteros: Recomienda el consumo de pan integral, arroz integral, avena y quinoa, que son ricos en fibra.
– Lácteos bajos en grasa: Favorece el consumo de lácteos bajos en grasa como el yogur y la leche desnatada.
– Proteínas magras: La dieta DASH incluye fuentes magras de proteínas como pollo sin piel, pescado y legumbres.
– Frutos secos y semillas: Se recomiendan en pequeñas cantidades debido a su alto contenido de grasas saludables.
2. Beneficios de la Dieta DASH
– Reducción significativa de la presión arterial en personas con hipertensión.
– Mejora en los niveles de colesterol y reducción de la inflamación.
La dieta DASH está diseñada para equilibrar los nutrientes clave y controlar el sodio, contribuyendo de manera efectiva a la prevención de las enfermedades cardiovasculares.
Dieta Plant-Based (Basada en Plantas)
Una dieta basada en plantas implica un enfoque alimentario en el que la mayor parte de los alimentos provienen de fuentes vegetales. Esto incluye frutas, verduras, legumbres, frutos secos, semillas, y granos integrales, mientras que se limita el consumo de productos animales.
1. Características Principales de la Dieta Plant-Based
– Exclusión de carnes rojas y procesadas: Las carnes rojas y procesadas son eliminadas en su totalidad.
– Alta en fibra: La dieta basada en plantas es naturalmente rica en fibra, lo que ayuda a reducir el colesterol y mejorar la salud digestiva.
– Grasas saludables: Los alimentos ricos en ácidos grasos insaturados como aguacates, frutos secos y aceite de oliva son esenciales en esta dieta.
– Proteínas vegetales: El tofu, los frijoles, las lentejas y el tempeh son las principales fuentes de proteínas.
2. Beneficios de la Dieta Plant-Based
– Mejora el perfil lipídico y reduce los niveles de colesterol LDL.
– Reducción del riesgo de hipertensión, obesidad y diabetes tipo 2.
Estudios han demostrado que una dieta basada en plantas puede ser efectiva para reducir los factores de riesgo cardiovascular y mejorar la salud del corazón en general
Dieta Baja en Grasas Saturadas y Trans
Una dieta baja en grasas saturadas y grasas trans es esencial para la salud cardiovascular, ya que éstas grasas pueden elevar los niveles de colesterol LDL, contribuyendo a la formación de placas ateroscleróticas.
1. Características Principales de la Dieta Baja en Grasas Saturadas y Trans
– Limitación de grasas saturadas: Evitar alimentos como la carne roja, mantequilla, quesos enteros y productos lácteos enteros.
– Evitar grasas trans: Las grasas trans presentes en alimentos procesados y fritos deben ser completamente evitadas.
– Grasas insaturadas: Se priorizan aceites vegetales, como el aceite de oliva, y frutos secos ricos en ácidos grasos insaturados.
2. Beneficios de la Dieta Baja en Grasas Saturadas y Trans
– Mejora los niveles de colesterol y reduce el riesgo de desarrollar enfermedades cardíacas.
– Ayuda a prevenir la aterosclerosis y a reducir la presión arterial.
Dieta MIND (Mediterranean-DASH Diet Intervention for Neurodegenerative Delay)
La dieta MIND es una combinación de la dieta mediterránea y la dieta DASH, diseñada específicamente para reducir el riesgo de enfermedades neurodegenerativas, pero también es altamente beneficiosa para la salud cardiovascular.
1. Características Principales de la Dieta MIND
– Enfocada en alimentos ricos en antioxidantes: Incluye alimentos ricos en antioxidantes como frutas, verduras y legumbres.
– Granos integrales y pescado: Similar a la dieta mediterránea, esta dieta promueve el consumo de pescado y granos integrales.
– Limitar alimentos procesados: Se recomienda limitar el consumo de pasteles, galletas y alimentos fritos.
2. Beneficios de la Dieta MIND
Mejora la función cerebral y reduce el riesgo de enfermedades cardíacas al disminuir la inflamación y el colesterol LDL.
Recetas para Enfermedades Cardiovasculares
A continuación se muestran algunas recetas recomendadas para los pacientes con enfermedades cardiovasculares
Lentejas aliñadas con salmón, queso fresco y tomate – 527,08 Kcal
Arroz integral con verduras al curry – 433,62 Kcal
Ensalada con queso cottage, jamon cocido, huevo y pepino – 287,41 Kcal
Ensalada con nueces y manzana – 219,4 Kcal
Garbanzos con espinacas y huevo duro – 427,79 Kcal
Espaguetis de edamame con tomate y atún – 249,07 Kcal
Dieta para Enfermedades Cardiovasculares
La dieta está basada en alimentos recomendados como frutas y verduras, legumbres y cereales integrales, eliminando grasas trans y saturadas, carnes procesadas y limitando las carnes rojas.
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Preguntas Frecuentes sobre la Dieta y la Enfermedades cardiovasculares
¿Cómo afecta la dieta a la salud cardiovascular?
Una dieta equilibrada puede reducir los factores de riesgo cardiovascular, como la hipertensión, los niveles elevados de colesterol LDL, y la inflamación crónica. Comer de manera saludable también ayuda a mantener un peso adecuado, que es crucial para evitar enfermedades como la diabetes y la obesidad, ambas relacionadas con el riesgo cardiovascular.
¿Qué alimentos son beneficiosos para el corazón?
Los alimentos ricos en fibra, antioxidantes y grasas saludables, como frutas, verduras, pescados grasos (ricos en omega-3), frutos secos, semillas, y aceites vegetales como el de oliva, son especialmente beneficiosos. También se recomiendan granos integrales y proteínas magras.
¿Por qué es importante reducir el consumo de sal?
Un alto consumo de sal aumenta la presión arterial, que es un factor de riesgo principal para enfermedades como el infarto de miocardio y los accidentes cerebrovasculares. Limitar la sal ayuda a mantener la presión arterial bajo control.
¿Es cierto que las grasas saturadas y trans son perjudiciales?
Sí, el consumo excesivo de grasas saturadas y trans está relacionado con niveles elevados de colesterol LDL y la formación de placas en las arterias, lo que puede provocar aterosclerosis. Estas grasas deben limitarse o evitarse.
¿Cuánto alcohol es seguro consumir?
El consumo moderado de alcohol (por ejemplo, una copa de vino tinto al día) puede ser beneficioso debido a sus antioxidantes, pero en exceso, el alcohol puede dañar el corazón y otros órganos.
¿Qué papel tienen las dietas basadas en plantas en la salud cardiovascular?
Las dietas basadas en plantas pueden reducir significativamente los factores de riesgo, ya que son bajas en grasas saturadas y ricas en fibra, antioxidantes y grasas insaturadas. Además, ayudan a controlar la inflamación y el colesterol.
¿Las dietas bajas en carbohidratos son adecuadas para el corazón?
Algunas dietas bajas en carbohidratos, como la dieta cetogénica, pueden ser controvertidas. Aunque pueden ayudar a perder peso y mejorar algunos factores metabólicos, deben ser bien planificadas para evitar un exceso de grasas no saludables, ya que esto podría aumentar el riesgo cardiovascular.
¿Qué alimentos debo evitar para prevenir enfermedades cardiovasculares?
Se deben evitar o limitar alimentos procesados, grasas trans, carnes rojas y procesadas, alimentos fritos, y bebidas azucaradas, ya que están asociados con un mayor riesgo cardiovascular.
¿Es necesario tomar suplementos para mejorar la salud del corazón?
Para la mayoría de las personas, obtener nutrientes a través de los alimentos es preferible. Sin embargo, en algunos casos, los suplementos de omega-3, vitamina D o coenzima Q10 pueden ser útiles bajo recomendación médica.
¿Qué dieta es la mejor para la salud cardiovascular?
Las dietas mediterránea, DASH y basada en plantas son ampliamente recomendadas por su evidencia científica. Cada una tiene beneficios específicos y se puede adaptar según las necesidades individuales.
¿Cómo tratamos en Dietfarma las enfermedades cardiovasculares?
En Dietfarma, abordamos las enfermedades cardiovasculares mediante un enfoque integral que combina la personalización de planes dietéticos con educación nutricional. Nos enfocamos en reducir los factores de riesgo como la hipertensión, el colesterol elevado y la inflamación crónica mediante dietas basadas en evidencia científica, como la mediterránea, DASH y dietas plant-based. Promovemos alimentos ricos en fibra, antioxidantes y grasas saludables, al tiempo que limitamos el consumo de grasas trans, azúcares refinados y sodio. Además, ofrecemos seguimiento constante para garantizar adherencia y adaptación a las necesidades de cada paciente, priorizando la prevención y el manejo efectivo de estas patologías.
Conclusión
La alimentación juega un papel crucial en la prevención y manejo de las enfermedades cardiovasculares. Adoptar una dieta rica en frutas, verduras, granos integrales y grasas saludables, junto con la eliminación de alimentos procesados y azucarados, puede reducir significativamente los factores de riesgo y mejorar la calidad de vida. Un enfoque nutricional adaptado a cada paciente es esencial, preferiblemente bajo la guía de un profesional de la salud.
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