Durante el embarazo, la futura mamá debe llevar una dieta equilibrada y variada, que incluya todos los grupos de alimentos, con el fin de proporcionarle al feto todos los nutrientes que necesita para su desarrollo.
¿Cuáles son los grupos de alimentos?
- Lácteos. Se deben tomar preferentemente desnatados, que contienen menor contenido en grasas. Evitar los quesos frescos o de pasta blanda (tipo camembert, brie, requesón…) que estén elaborados con leche no pasteurizada, ya que podrían contener listeria. Los lácteos son alimentos ricos en proteínas y en calcio, mineral necesario para la formación de los huesos del bebé.
- Carne, pescado y huevo. Deben tomarse bien cocinados, con el fin de evitar infecciones alimentarias y, en el caso de la carne, para prevenir también la toxoplasmosis. Este grupo de alimentos aportan proteínas a la dieta, que tienen la función de construir las estructuras del cuerpo. Las carnes rojas son también ricas en hierro, mientras que el pescado tiene omega-3, que es importante para el correcto desarrollo del feto. Recordar que hay que evitar el consumo de peces grandes (ejemplo: emperador, atún…), por su alto contenido en mercurio, que es tóxico.
- Legumbres. Nos aportan proteínas vegetales e hidratos de carbono. También presentan fibra, actuando como regulador gastrointestinal. Es conveniente tomarlo dos veces por semana.
- Cereales y féculas. Deben ser integrales, ya que aportan una mayor cantidad de fibra y de minerales. La fibra hace que se libere más lentamente la glucosa en la sangre y a la vez hace de regulador gastrointestinal, evitando el estreñimiento. La función de este grupo de alimentos es básicamente energética, por su alto contenido en hidratos de carbono y la cantidad que se debe consumir debe estar relacionado con la actividad física que se realice.
- Verduras y hortalizas. Se deben consumir diariamente en abundancia, ya que aportan una gran cantidad de vitaminas, minerales y fibra. Si se consumen crudas, hay que lavarlas muy bien, para evitar la toxoplasmosis.
- Frutas. También se deben tomar a diario, ya que aportan vitaminas, minerales, fibra y azúcares. Si se consumen sin pelar, hay que lavarlas muy bien, para evitar la toxoplasmosis.
- Grasas vegetales. En este grupo incluimos los frutos secos y el aceite, preferentemente el aceite de oliva. Su función es energética. Consumirlo con moderación, ya que aportan muchas calorías.
¿Qué conclusiones sacamos?
Es importante que la futura mama lleve una alimentación compuesta por todos estos grupos de alimentos, consiguiendo una alimentación equilibrada y variada. De esta forma presentará un estado de salud óptimo, consiguiendo que su futuro bebé se forme correctamente.
Es conveniente evitar las carnes grasas y los alimentos procesados, ya que aportan altos contenidos de grasas saturadas y sal y son altamente calóricos, promoviendo el sobrepeso en el embarazo.