Ingredientes
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brócoli 300 gr. 1 Unidad pequeña 40.90 kcal. -
pechuga de pollo 200 gr. 2 Filete pequeño 192.72 kcal. -
cebolla 50 gr. 1/2 Pieza pequeña 16.96 kcal. -
leche entera de vaca 100 gr. 1 Taza de café 63.60 kcal. -
nata para cocinar 60 gr. 3 Cucharada sopera 204.90 kcal. -
queso parmesano rallado 30 gr. 2 Cucharada sopera 135.57 kcal. -
sal 1 gr. 1/2 Pellizco 0.00 kcal. -
pimienta negra molida 2 gr. 1 Pellizco 4.53 kcal. -
aceite de oliva 5 gr. 1 Cucharada de postre 45.00 kcal.
Preparación
1. Limpiamos, pelamos (desechamos los tallos gruesos) y troceamos en ramilletes el brócoli.
2. Ponemos a hervir el brócoli con agua salada unos 12 minutos. Reservar.
3. Por otro lado, pelamos y cortamos en julianas la cebolla.
4. En una sartén con aceite de oliva, cuando esté caliente, añadimos la cebolla y le damos vueltas hasta que esté todo pochado.
5. A continuación, añadimos el pollo cortado en tiras, la sal y la pimienta.
6. Cuando el pollo esté blanco, añadimos la leche, el queso y la nata. Lo removemos todo.
7. Seguidamente añadimos el brócoli bien escurrido y lo mezclamos todo. Lo dejamos cocinar unos 5-10 minutos.
8. Finalmente, lo pasamos a un recipiente para horno, añadimos una cuchara de queso por encima y lo metemos en el horno a 180 grados durante unos 5 minutos, hasta que la capa superior quede dorada.
9. Lo servimos en un plato y estaremos ante una de esas recetas cetogénicas de brócoli, con un elevado aporte en grasas.
Información adicional
Estamos ante una de esas recetas de brócoli altas en grasas. El brócoli es muy nutritivo, siendo ricos en vitaminas, minerales, fibra y antioxidantes. Destaca por ser una de las verduras con más propiedades antioxidantes, siendo ideal para prevenir la aparición del cáncer (principalmente los cánceres de próstata, colon y mama). Reduce los niveles altos de triglicéridos y colesterol en sangre e impide su acumulación en las arterias, siendo muy aconsejable para aquellas personas con enfermedades cardiovasculares. Es interesante consumirlo en la menopausia, ya que regula el equilibrio hormonal y el nivel de estrógeno. Por su contenido en fibra, también es ideal su consumo en personas que padecen de estreñimiento. Presenta altos niveles de vitamina K, que participa en la coagulación de la sangre y un elevado consumo de estas verduras (vitamina K) puede interferir con ciertos medicamentos (ej. Sintrón) para regular la coagulación de la sangre.
Por otro lado, el queso, la nata y la leche que le hemos añadido a este plato, hace que su contenido en grasas sea muy elevado y a la vez su contenido en calorías. Por otro lado, nos aporta proteínas de alto valor biológico y una cantidad importante de Calcio y vitamina D, que actúa como fijador del calcio a los huesos.
La pechuga de pollo que encontramos en este plato es rico en proteínas de alto valor biológico y con un bajo contenido en grasas. En su composición también encontramos nutrientes, con importantes cantidades de vitaminas (vitaminas del grupo B, vitamina A) y minerales (hierro, zinc y fosforo). Las vitaminas del grupo B permiten el aprovechamiento de los nutrientes energéticos (proteínas, hidratos de carbono y lípidos), intervienen en la formación de los glóbulos rojos, en el funcionamiento del sistema nervioso y además son necesarias para mantener una buena salud en los tejidos que componen nuestro cuerpo. El hierro participa en la formación de los glóbulos rojos y el transporte de oxígeno, evitando la anemia ferropénica. El zinc mejora el sistema inmunitario. El fósforo, forma los huesos.
En definitiva, podemos decir que estamos ante una de esas recetas altas en grasas de brócoli gratinado, ideal para personas que hacen dietas cetogénicas para perder peso.