Ingredientes

Preparación

1. En una taza ponemos la leche desnatada, previamente calentada en el microondas durante aproximadamente 90 segundos.

2. Añadimos el café soluble o el café de cafetera, según nuestro gusto.

3. Ponemos la miel y revolvemos con una cucharilla.

4. Y ya está listo para beber!

 

 

 

 

Información adicional

El café es una de las bebidas de mayor consumo en el mundo y, especialmente, el café soluble gracias a su facilidad de preparación.

El café contiene cafeína, alcaloide cuya acción es estimulante del sistema nervioso central, lo que nos mantiene más activos, despiertos y concentrados; aunque su consumo alto también puede provocar nerviosismo e insomnio. En casos de hipertensión o problemas de insomnio, se recomienda tomar el café descafeinado.

Mención especial merece el contenido en acrilamida del cafe soluble, del llamado café instantáneo, que puede dañar a medio plazo nuestros nervios y favorecer la aparición de cancer. Adicionalmente, puede contener azúcares añadidos en altas cantidades, por lo que no se recomendaría su consumo en caso de diabetes.

La leche desnatada es una buena opción para reducir el consumo de grasas, aunque también se reduce el aporte de vitaminas liposolubles, por lo que sería aconsejable consumir una leche desnatada enriquecida con vitaminas añadidas.

La miel, antes de extenderse el consumo del azúcar, era el edulcorante primario por excelencia.

La miel tiene propiedades antibacterianas, antiinflamatorias, antisépticas, es una fuente natural de antioxidantes, por lo que contribuye a prevenir las enfermedades cardiovasculares y las que cursan con inflamación y es popularmente utilizado para el alivio de la tos y el dolor de garganta.

Asimismo, también colabora en una mejor metabolización de los alimentos, favoreciendo una buen digestión y contiene proteínas, fundamentales para el crecimiento.