Ingredientes
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muslo de pollo 200 gr. Unidad pequeña 41.27 kcal. -
cebolla 50 gr. Pieza pequeña 33.91 kcal. -
ajo 5 gr. Diente 91.56 kcal. -
zanahoria 60 gr. Pieza pequeña 30.71 kcal. -
apio 40 gr. Pieza pequeña 11.89 kcal. -
hoja de laurel 2 gr. Unidad grande kcal. -
perejil 5 gr. Cucharada de postre 29.91 kcal. -
sal 2 gr. Pellizco kcal. -
pimienta negra molida 2 gr. Pellizco 226.38 kcal. -
agua mineral 1000 gr. Vaso de agua kcal.
Preparación
- Coloca el muslo de pollo en una olla pequeña y añade la zanahoria, apio, cebolla, ajo, laurel y perejil.
- Vierte el agua suficiente para cubrir todos los ingredientes (aproximadamente 1 litro).
- Lleva la olla a ebullición a fuego alto. Cuando comience a hervir, reduce el fuego a medio-bajo y deja cocinar a fuego lento.
- Retira la espuma que se forma en la superficie con una cuchara, para obtener un caldo más claro.
- Cocina a fuego lento durante aproximadamente 1 a 1:30 hora, hasta que el pollo esté bien cocido y los vegetales hayan liberado sus sabores.
- Una vez que el caldo esté listo, retira el muslo de pollo y los vegetales. Cuela el caldo con un colador fino para eliminar cualquier impureza y servir.
Información adicional
El caldo de pollo tradicional es una receta clásica y reconfortante que combina pollo, zanahorias, apio, cebolla y ajo para crear un caldo rico y lleno de sabor. Cocinado a fuego lento con hojas de laurel y hierbas frescas, este caldo es perfecto para los días fríos o cuando se necesita una comida nutritiva y fácil de digerir. Es ideal para disfrutar solo o como base para otras sopas y guisos.
- Muslo de pollo: Alimento alto en proteínas y bajo en grasas, especialmente si se consume sin piel. Incluye vitamina B6, niacina, fósforo y selenio, todos importantes para diversas funciones corporales. Alimento muy versátil que se adapta perfectamente a diversos gustos y platos.
- Verduras: Ricas en vitaminas como vitamina C, vitamina A y minerales como el potasio y magnesio. Alto contenido en fibra que mejora la digestión ayuda a mantener la saciedad y regula los niveles de azúcar en sangre. Excelente fuente de antioxidantes que protegen las células del daño y reducen el riesgo de enfermedades crónicas.
En conclusión, el caldo de pollo tradicional es un plato atemporal que ofrece calidez y nutrición. Con su combinación de ingredientes frescos y su cocción lenta, se convierte en una idea perfecta para disfrutar en los días fríos o cuando necesitas una comida sencilla y saludable, su sabor y beneficios lo convierten en un clásico indispensable en cualquier cocina.