Ingredientes
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carne de cerdo magra 600 gr. 1 Pieza mediana 110.60 kcal. -
cebolla 250 gr. 1 Pieza grande 33.91 kcal. -
zanahoria 240 gr. 2 Pieza mediana 30.71 kcal. -
tomate 250 gr. 1 Pieza grande 17.85 kcal. -
patata 600 gr. 6 Pieza pequeña 68.26 kcal. -
ajo 20 gr. 4 Diente 91.56 kcal. -
vino blanco 100 gr. 1 Vaso de vino 78.00 kcal. -
caldo de carne envasado 400 gr. 1 Vaso de agua 2.50 kcal. -
aceite de oliva 30 gr. 6 Cucharada sopera 900.00 kcal. -
hoja de laurel 1.5 gr. 3 Pieza mediana 0.00 kcal. -
pimienta negra molida 2 gr. 1 Pellizco 226.38 kcal. -
sal 4 gr. 2 Pellizco 0.00 kcal.
Preparación
1. Cortamos la carne en trozos medianos, sazonamos con sal y pimienta y reservamos.
2. Limpiamos, pelamos y cortamos al gusto todas las verduras.
3. En una olla calentamos el aceite de oliva y agregamos la carne, le damos varias vueltas hasta que quede marcada, retiramos y reservamos.
4. En el mismo aceite añadimos el ajo y la cebolla y removemos hasta que quede dorado.
5. Seguidamente añadimos el resto de verduras y removemos hasta que quede cocinado.
6. A continuación, echamos la carne, el vino, las hojas de laurel y rectificamos de sal y pimienta. Lo dejamos unos 10-15 minutos a fuego medio.
7. Cubrimos todo con el caldo de carne (que hemos calentado previamente) y lo guisamos a fuego lento durante 1 hora aproximadamente, hasta que la carne esté tierna.
8. Pasado ese tiempo ya tendremos listo este plato tan sabroso.
Información adicional
La carne de cerdo nos aporta una gran cantidad de proteínas de alto valor biológico y su contenido en grasas es moderado (menor de lo que la gente cree). También tiene propiedades nutricionales, aportándonos vitaminas (destacando las vitaminas del grupo B) y minerales (destacando hierro, zinc, fosforo, magnesio y potasio). El hierro que encontramos previene la anemia ferropénica, consiguiendo un buen rendimiento físico y el zinc nos ayuda a almacenar la insulina, es beneficioso para el sistema inmunitario y la cicatrización de heridas, ayuda a combatir la fatiga y es esencial en la síntesis de proteínas.
Destaca su contenido en vitaminas del grupo B, que permiten el aprovechamiento de los nutrientes energéticos (proteínas, hidratos de carbono y lípidos), intervienen en la formación de los glóbulos rojos, en el funcionamiento del sistema nervioso y además son necesarias para mantener una buena salud en los tejidos que componen nuestro cuerpo. Es recomendado tomar esta carne en periodos de embarazo o lactancia y también después de operaciones o durante periodo de convalecencia, ya que durante estos periodos se produce desgaste de estas vitaminas.
Las verduras que le hemos añadido a este plato son bajas en calorías, aportándonos fibra que regulan nuestro tránsito intestinal y evita el estreñimiento. Además presentan vitaminas, minerales y antioxidantes, dándole un aporte muy nutritivo y saludable a esta receta.
Las patatas son energéticas, aportándonos hidratos de carbono complejos, siendo fundamental para el mantenimiento de los niveles de azúcar en sangre. Es rica en vitamina C, aumentando las defensas y potenciando la inmunidad de nuestro organismo. También presenta altos niveles de potasio, ayudando a controlar la hipertensión.
Siempre debemos decantarnos por las carnes magras, que tienen menos grasas saturadas, menos colesterol y engordan menos que las carnes grasas, que son perjudiciales para la salud y que aumentan el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, hipertensión, colesterol, triglicéridos…