Ingredientes

Preparación

1. Cocemos los macarrones en abundante agua hirviendo con una pizca de sal hasta que estén al dente, tras unos 6 minutos de cocción.

2. Colamos los macarrones y refrescamos bajo el chorro de agua, escurrimos y lo colocamos en un bol.

3. Por otro lado, limpiamos, pelamos y cortamos al gusto el tomate.

4. Añadimos en el bol el tomate, el queso cortado a tacos y el atún.

5. Por último, lo aliñamos con aceite, vinagre, sal y orégano y ya tenemos esta ensalada de pasta de Dietfarma. Tu nutricionista online de Dietfarma te lo incluirá en tus dietas.

Información adicional

Receta equilibrada, que nos da un aporte energético a través de la pasta, el queso y el atún y un aporte nutricional mediante el tomate.

La pasta nos aporta hidratos de carbonos que son muy calóricos. También presentan vitaminas (vitaminas del grupo B, que son antioxidantes celulares) y minerales (fósforo). Presentan un contenido importante en fibra, siendo mayor en las pastas integrales, regulando nuestro tránsito intestinal.

El atún enlatado al natural es energético, aportándonos proteínas de alto valor biológico. Su alto contenido en vitamina B3, hace que sea beneficioso para el sistema circulatorio y ayude a reducir el colesterol. Presenta un alto contenido en sodio para su conservación, siendo poco recomendado para aquellas personas con hipertensión. En los supermercados ya existen latas de atún al natural bajas en sodio, muy adecuado para estas personas.

El queso fresco que hemos añadido nos aportará proteínas animales de alto valor biológico y presentar un contenido en grasas bajo, ya que hemos usado queso fresco desnatado, con un menor aporte energético. También es rico en vitaminas y minerales. Presenta una importante fuente de calcio, que se disuelve en el ácido láctico del queso, haciéndose más absorbible por nuestro sistema digestivo. El calcio fortalece los huesos y los dietes, previene la osteoporosis, ayuda al crecimiento infantil y ayuda a la cicatrización de las heridas. La vitamina D que presenta, permite que el calcio se fije mejor a los huesos.

Por otro lado, el tomate es muy nutritivo, con un bajo aporte energético. Es rico en vitaminas (B, C y A), minerales (potasio, fósforo y magnesio), antioxidantes y fibra. Destaca la presencia de vitamina C, que actúa como antioxidante y previene el cáncer. La vitamina A ayuda a mejorar la visión. Presenta un alto contenido en licopeno, antioxidantes que le da el color rojo, que ayuda a prevenir algunos tipos de cáncer, disminuye los niveles de colesterol y triglicéridos en sangre y protege frente a las enfermedades cardiovasculares. Es bajo en sodio, por lo que es muy recomendado en hipertensos. Su piel es rica en fibra, regulando nuestro tránsito intestinal y evitando el estreñimiento, por lo tanto hay que comerlo con la piel.

En definitiva, podemos decir que nos encontramos ante una receta saludable, ideal para personas que hacen dieta equilibrada.